El balanceo de los brazos les ayuda a los niños a calmarse o simplemente disfrrutan realizándolo.
Lo utilizan quienes tienen dificultad para mantenerse quietos estando en una fila, esperando un turno o en momentos que deben estar tranquilos.
Soluciones:
- Si el balanceo de brazos molesta otras personas, explícale las razones por qué no es apropiado (se ve extraño o podrías lastimar a alguien, etc.).
- Pídele que se detenga o que esconda las manos en sus bolsillos.
- Si está en la fila esperando una actividad, colócalo al final de ella donde será menos observado y molestará menos.
- Asígnale una actividad para que mantenga sus manos y brazos ocupados.